Las farmacias abren una vía de ayuda al Banco de Alimentos

Hasta el día 20 se puede donar leche infantil, pañales y productos de higiene
El Colegio Profesional presenta esta campaña que llegará a toda la provincia

HUESCA.- El Colegio de Farmacéuticos de Huesca inicia una colaboración con el Banco de Alimentos para recoger en la provincia alimentos infantiles y productos de higiene. La campaña se presentó ayer en el colegio profesional durante un acto en el que participaron Ángel Mas, Pilar Domingo e Ignacio Compairé, presidente, secretaria y vocal coordinador de vocalías técnicas del colegio, y Julia Lera y Luis Artero, presienta y miembro de la junta del Banco de Alimentos, respectivamente. Ignacio Compairé explicó que hasta el 20 de diciembre quieren recoger “la mayor cantidad posible, sobre todo de leches infantiles de inicio y continuación, pañales y compresas de algodón, así como productos de higiene como cepillos de dientes, pasta dental, gel o crema corporal”, ya que se trata de “artículos de primera necesidad para las familias con niños pequeños”. Desde el Colegio profesional apelan a la solidaridad de los altoaragoneses. “La idea es que los clientes vengan a las farmacias y colaboren con lo que ellos decidan, y desde nuestras oficinas tratar de facilitarles todo en la medida que podamos”.

En los establecimientos habrá cajas del Banco de Alimentos en las que depositar los productos, y por parte de los profesionales,“aunque no podemos decirle a cada farmacéutico como lo tiene que hacer, la idea quitar o reducir el margen del que se beneficia la farmacia para que el donativo sea mayor”, confirmó Ángel Mas.

Julia Lera reconoció que desde el Banco de Alimentos llevan varios años intentando que se incorporen determinados artículos que “podrían chocar en un banco de alimentos, pero la persona es integral y se necesitan productos que en este primer mundo se usan diariamente y de los que no nos acordamos”.

En muchos casos se habla de familias en las que hay niños pequeños que atender, y “en los supermercados hay cosas que no están, y ahora que la farmacia se ha abierto más allá de los medicamentos, se pueden encontrar allí, y los farmacéuticos son los que mejor pueden recomendar las cosas más necesarias y útiles.

Al Banco de Alimentos, las asociaciones de la provincia que son las que están en contacto con el beneficiario, les comentan sus necesidades, “y hablando con ellas nos demandan este tipo de artículos”, apuntó Julia Lera.
Ángel Mas insistió en que los profesionales “estamos a disposición del Banco de Alimentos para colaborar en las medida de sus necesidades”, y con esta primera recogida rompen el fuego para colaboraciones posteriores. “La farmacia es un establecimiento privado pero de interés público en el que se dispensan medicamentos, pero también se vuelca con la solidaridad y con este tipo de causas. Lo que nosotros buscamos es que la farmacia no solo sea un ente sanitario, sino que también estamos con la sociedad y nos volcamos con ella”.